Soy como el sol de invierno
el que brilla en un día claro,
y se vuelve helada
en la noche oculta,
morena y espesa,
brillante y soleada,
soy oscura y profunda,
clara y despejada,
callada gritando silencios
entre palabras enmudecidas,
doy todo lo que soy,
entre abrazos regalados
contra corazones desatados.
Si huyes de mi...
no correré detrás de ti.
Tengo mi dulce rutina
que me acaricia mi calma,
y mi demente locura
que me baila en el alma.
(Siempre me vas a querer, yo represento para ti todos los pecados que nunca has tenido el coraje de cometer. Oscar Wilde)
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