Llenaba vacíos
con restos de frío,
en ese último invierno
alejándose a paso lento,
tapaba ausencias
con pieles disecadas
sobre camas desechas,
cambiando cicatrices viejas
por heridas nuevas,
ocupaba espacios
de nada llenos,
...el viento soplaba espeso,
dejando su rostro seco,
y los ojos entristecidos
siempre llorosos...
(Cada día hay más corazones que funcionan sin látidos.)(...)
No hay comentarios:
Publicar un comentario