27 enero, 2019

Libre.

Sé abrió la puerta
aquella,
que tanto tiempo
permaneció cerrada,
el crujir de sus bisagras,
el polvo que bailaba
con la luz que aparecía,
tapándose los ojos
deslumbrada,
sintió el frío
que entraba,
pero no le molestaba,
vio la nieve que caía,
copos que se derretían
sobre sus manos,
que los sostenían,
y se quedó mirando
ese camino
que pronto
andaría,
dejando atrás
aquella cárcel en que vivía.

(Tener claro donde ya no volver es una gran liberación)(...)

No hay comentarios:

Publicar un comentario